Hay veces en las que la química y la autenticidad superan las expectativas. Este par tiene un sello único en cada uno de sus huesos. Frescos, divertidos, realmente geniales. Poder ser parte de su historia, reírnos con ellos y acompañarles en el camino fue toda una experiencia. Mil gracias por confiar ciegamente, por querer ponerse en nuestras manos, por permitirnos ser parte de un día así. Una de las cosas realmente bonitas de esta profesión es poder hacer magia y emocionar pero sobre todo tener la suerte de toparse con gente así. Qué sean increíblemente felices AyF. Quiéranse así de bonito siempre y a seguir comiéndose el mundo como filosofía de vida. La vida vista así no empacha.